Gestionar el trabajo en casa
Es habitual ver como nuestros hijos llegan a casa con algunas tareas y/o deberes para que realicen fuera del horario escolar y también es habitual ver como los papás se toman estas tareas como algo personal, no dejando en la mayoría de los casos que los niños puedan desarrollarlas de manera autónoma.
En frecuentes ocasiones los papás regañan a los niños para que ellos se pongan cuanto antes a hacer las tareas, para que no se levanten de su asiento mientras las hacen, para que no pregunten y para que no las hagan mal.
A veces exigimos una serie de funciones que, al fin y al cabo están fuera del alcance de nuestros hijos ya que en la mayoría de las ocasiones son muchas las regañinas y pocos los estímulos y hábitos positivos de trabajo que existen en nuestro hogar. Es por ello que en la mayoría de las ocasiones los papás se enfadan y acaban haciendo las tareas ellos mismos, resultando frustrante además de perjudicial para los más pequeños.
Es importante implantar y coordinar en casa una serie de hábitos que ayuden a los papás y a los más pequeños a controlar este diario que a veces se nos puede “escapar de las manos”.
Partiendo de la edad del niño es recomendable que, se realice la tarea en un tiempo determinado, además de la tarea es de vital importancia realizar otras actividades extra escolares como hacer deporte o jugar y relacionarse, por lo que las tareas deberán tener un horario estipulado dentro de la tarde del menor. No importa en qué momento de la tarde se realice la tarea mientras ésta no se deje para última hora, ya que es muy probable que con el cansancio del día los más pequeños estén más desconcentrados.
Por otra parte es recomendable que el niño tenga un espacio tranquilo y ordenado para trabajar, es mejor alejarlos de estímulos distractores como la tele, juegos u otros objetos. Si creamos un ambiente agradable para el trabajo la atención estará más focalizada en lo que estemos haciendo. Si el niño está demasiado cansado debido a la cantidad de tarea es mejor dejarlo descansar durante un tiempo para “recargar las pilas”.
Para reforzar la autonomía del menor es importante que hagan en solitario la tarea. Esto no implica que no puedan preguntarnos si no entienden algo, pero bajo ningún concepto esto será un aliciente para que los papás hagan los deberes por los niños.
A veces los papás confusos creen que sus pequeños no entienden o no se enteran de nada, es muy importante focalizar el trabajo positivamente.
Felicitar a los más pequeños por lo que hacen bien induce más al progreso educativo que criticar constantemente lo que hacen mal.